Esta semana pudimos observar un fragmento de la película "Los Dioses deben estar locos" donde un grupo de aborígenes se encontraban un extraño objeto lanzado por los dioses, una "botella". Si bien, la botella tenía mucha utilidad, por su dureza, la formas en que podía pintar, su belleza, etc; los aborígenes nunca la necesitaron y al usarla para la mayoría de sus actividades surgió el problema. Todos querían usarla al mismo tiempo y para cualquier cosa. Se originaron las peleas y las discusiones. Por lo que el jefe de la tribu decidió esconderla y olvidarse de ella. (Si no has visto la película te recomiendo verla).
A mi grupo y a mi personalmente nos causó una grata reflexión. Muchas veces dejamos que las tecnología abarque nuestro día a día, sin dejarnos ver que esta pasa a absorbernos y nos vuelve esclavo de la misma. Hay que tener una especie de control para que esto no suceda. Si bien las tecnologías han traído un cambio brutal para la sociedad, tenemos que saber regirnos y utilizarlas para y por nuestro bien. (Les dejo una foto del film)
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